jueves, 24 de enero de 2008

Paradise Now



Trailer en inglés de una película impactante pero que hace reflexionar sobre las razones de palestinos e israelíes acerca de las víctimas y verdugos, el terrorismo y la ocupación. Yo acabo de verla y aún estoy impresionado.




Vídeo de una ONG pacifista israelí que aboga por el diálogo de civilizaciones.

Ayer se abrió el cerco y aislamiento que Israel impuso a la Franja de Gaza (dominada por Hamás), después de que un grupo de hombres encapuchados hicieran explotar durante la madrugada parte del muro fronterizo de Gaza con Egipto. Miles de personas han huido al lado egipcio de Rafah a comprar víveres y medicinas, o simplemente a pasear según les he oído decir en la radio a los corresponsales de Radio Nacional de España o la Cadena Ser

Ayer un nuevo atentado en Iraq ha producido víctimas entre ellas mujeres y niños.

Ayer se cumplió un año de la muerte del gran periodista polaco Kapuscinski quien dijo una vez:

"La guerra es la degradación del hombre al mismo nivel que la bestia. Cada guerra es una derrota para todos. No hay ningún vencedor. He visto muchas guerras, pero recuerdo especialmente cómo acabó la II Guerra Mundial. Hubo unos días de euforia, pero luego fue saliendo a la luz la enorme infelicidad que la acompañaba: los mutilados, los niños huérfanos, las ciudades heridas y arrasadas, la gente irremediablemente enloquecida.

La guerra no termina el día en el que se firma el armisticio. El dolor persiste mucho tiempo. Existe un cuento del escritor polaco Jerzy Andrzejeswki que se titula El verdadero final de la gran guerra. El verdadero final de la guerra se produce muchos, muchos años después de la declaración oficial. En el fondo, la guerra no acaba nunca. La guerra es consecuencia de la interrupción de las comunicaciones entre los hombres. No hay que olvidar nunca que la capacidad de comunicarse es la esencia de la humanidad. A veces, en momentos como éstos, uno siente la necesidad de salirse de la corriente del río y sentarse en la orilla a observar las cosas desde fuera. Los acontecimientos se suceden, veloces y caóticos, y engendran remolinos contradictorios e incomprensibles. Es preciso aprender a mirar bajo la superficie, donde todo va más despacio y es posible intentar captar la naturaleza profunda de la historia que estamos viviendo, lo que Fernand Braudel llamaba la larga duración."

El próximo 30 de enero es el Día Escolar de la Paz y la Noviolencia

2 comentarios:

Anónimo dijo...

óscar me gusta mucho lo que me dices en el blog. no hago mas que pensar en eso. en cuanto decante algo interesante te lo cuento. tu energía es muy valiosa.

por cierto, viva el museo británico! y viva mesopotamia!

un abrazo

Pistacho dijo...

me gusta la campaña de avaaz.org
Gracias por ponerla aquí, que no la conocía.

Un abrazo!!